viernes, 16 de agosto de 2013

Displasia de cadera II

Parecía que nunca pasarían, pero los 3 meses pasaron. El lunes pasado tuvimos la revisión con el traumatólogo. Unos días antes habíamos tenido una ecografía de las caderas para medir el ángulo alfa y ya la ecografista nos dijo que estaba muy bien, pero que lo tenía que confirmar el traumatólogo.
El lunes el médico abrió las ecografías, nos dijo que estaba todo bien (ya íbamos con la sonrisa de oreja a oreja) y acto seguido se puso a ajustar el arnés a la niña (adiós sonrisa) pero todo terminó bien, lo ajustaba porque tiene que llevarlo de forma preventiva dos meses por la noche, pero por el día ya está libre para patalear a gustito. ¡Adiós arnés! Estamos muy felices. Para celebrarlo fuimos a por unos pantalones conmemorativos, que después de tres meses con las piernas al aire, nos apetecía.

Pantalones conmemorativos del día sin arnés ^^

Como ha llegado gente a este blog buscando información sobre la displasia y el arnés tipo Correctio/órtesis de Von Rosen voy a dejar por aquí escrito mi experiencia:
  • Cuidado al quitar el pañal. Nosotros encontrábamos de vez en cuando arañazos en el muslo y pensamos que era la niña que se arañaba con esas minizarpas con las que nacen. Pero resulta que si no tienes cuidado con el velcro, al tirar del pañal puede arañarles la piel. Para que no se les quede el peso de la culpa como a mi, a doblar bien el velcro antes de sacarlo.
  • Un portabebé ergonómico. Esto debería ser básico teniendo o no displasia, pero para bebés con displasia es vital. Si es recién nacido solo podría ir tumbado en el capazo, y con el arnés solo tumbado boca arriba, con riesgo de plagiocefalia. Así que un fular permite al bebé estar más cómodo, además de proporcionar la postura ranita o de M para los que tenga un grado leve de displasia y otras innumerables ventajas.
  • Obviamente adiós vestiditos, camisetas, pantalones, ranitas y pijamas. Así que a pedir bodys chulos para compensar. Las camisetas se enrollan y pueden rozarse la barriguita con el chisme demoníaco arnés.
  • Pedir al traumatólogo unos calcetines para proteger las piernas de la goma asesina. Nuestro médico lo da siempre, pero el de la puerta de al lado no lo da. Así que a pedirlo. Lo que es un punto que va cediendo y termina enrollándose así que recomiendo tunear con algo parecido a esto:

"Calcetines" caseros

Básicamente un tubo de tela de camiseta (si es vieja está más suave) se hace en dos minutos con una máquina de coser. Lo de la tela de florecitas es un añadido para que no se enrollen y se vayan para atrás. Se hacen dos pares, por si los pises y fugas ;)

Armarse de paciencia que se cura relativamente rápido, los papis nos terminamos acostumbrando y los peques son unos benditos y no se quejan (nosotros en su lugar seríamos almas en pena.

¡Me voy corriendo a mordisquearle los muslos a mi peque! :D

lunes, 5 de agosto de 2013

Equipamiento de serie de un bebé



Todos sabemos antes de tener un bebé en las manos las cosas que trae uno básico: el sistema de lubricación BABAs, distintas alarmas (llanto, gritito, pedos o_O) o detector de nivel de combustible, ya sea diesel o gasolina (LM o LA). En estos dos meses he descubierto más equipamiento en mi bebé, de ese que nos ponen en letra minúscula a toda velocidad en los anuncios de la tele, a saber:
  • Altímetro: de nada vale que la cojas en brazos si vas a estar sentado en el sofá. No no no. Si la coges es para estar de pie. Y aunque parezca dormida, saltará una alarma bastante potente en decibelios en el momento en el que intentes plantar tus posaderas de nuevo en el sofá.
  • Detector de movimientos: se vende conjuntamente con el altímetro. Ya que estás de pie, ¿qué haces que no me estás paseando? En función del estado de ánimo del pequeño ser, este paseo deberá estar amenizado de luz, sonido o del estudio detallado de las obras pictóricas colgadas en el pasillo, por enésima vez (y las que te rondaré moreno!) 
  • Sensor de proximidad: este extra es especialmente sensible si se trata de detectar al elemento MAMÁ. Tu dejas a tu criatura plácidamente dormida (por supuesto en brazos del abnegado papá, paseando pasillo arriba y abajo), te vas al baño y en el instante en el que pones un pie dentro de la ducha (antes no, porque hacerte salir corriendo cuando todavía estás vestida no tiene tanta gracia) escuchas a tu pichón reclamándote a berridos inconsolables.
  • Giroscopio: como un móvil de última generación tu bebé responde milimétricamente a la inclinación. ¿Que me tienes tumbada sobre tus antebrazos a 32º? protestaré porque quiero que me levantes un poquito, no tanto, otro poco más, ahí justo ahí!! A 34º. Sí señor, cualquier otra opción es motivo de llanto-protesta. 
  • No todo es equipamiento para la comodidad del bebé. Para nosotros dispone de un dispositivo especial "Medidor de laxitud en extremidades" los bracitos van descendiento gradualmente y el momento en que manos y pies están en contacto con el colchón es indicativo de que el bebé está dormido del todo. Tapar y salir por piernas a la cocina a comerte ese plato de lentejas frío desde hace una hora
Por supuesto el equipamiento es evolutivo, para el que guste cambiar de coche cada poco, una gozada, al resto nos toca estar muy atentos, ya que no hay manual de instrucciones que valga.

viernes, 2 de agosto de 2013

Una lactancia feliz



La semana mundial de la lactancia materna y tres meses de feliz lactancia me parecen dos buenos motivos para hablar de mi experiencia.
En mi familia somos muy de teta, mi abuela le dio el pecho a mi madre año y medio y mi madre a mi 8 meses (cada 3 horas y 10 minutos por pecho, eso sí). Mi abuela siempre habla con mucho cariño de sus periodos de lactancia y mi madre dice que era lo que le pedía el cuerpo. Yo tenía claro meridiano que iba a dar el pecho, que no tendría ningún impedimento para ello.
En la lactancia de Lagartija se han dado todos los factores para que una lactancia salga adelante.  

Me informé mucho, muchísimo. Leí todo lo que pude y más de lactancia, fui a grupos de apoyo estando embarazada y aprendí algo cada vez. Pedí consejo a las pocas mamis de mi entorno que están dando el pecho. Una me dijo "para dar el pecho, solo tienes que querer". Y me lo repetí como un mantra.

Apoyo. El primero mi marinovio. Yo soy más relajada, él es prácticamente un tetalibán ;). Ha cumplido a la perfección su papel, la noche tras el parto yo no podía ni abrir los ojos de agotamiento, él me puso la niña al pecho mientras yo dormía, fue el primero en reconocer el llanto de hambre de su pequeña, fue conmigo a los grupos de apoyo. La enfermera pediátrica de mi centro de salud es muy pro-lactancia y me dice cosas tan bonitas como que mi bebé y yo estamos sincronizadas, que tenemos una conexión especial y esa leche es lo mejor del mundo para ella. Además en el hospital están haciendo un buen trabajo para mejorar las tasas de lactancia. Cuando subimos a planta me preguntaron "¿Apunto a la niña para el biberón de las 3am? No, vamos a teta." Y nadie me ha vuelto a nombrar un biberón en estos 3 meses. Cada mañana vino una asesora de lactancia a la habitación a ver cómo íbamos. No fueron muy didácticas, pero me ayudaron a curar una grieta que me salió el primer día y te dejaban con la sensación de que se preocupaban por ti. Llevo dos meses con problemas de salud y los médicos de urgencias se han parado conmigo a mirar e-lactancia.org a ver qué podían darme para que no interfiriera con mi lactancia.

Los primeros días fueron durillos, en retrospectiva me parece que no fue nada, pero en su momento tuve bastante dolor en el pezón, dolor que tal como vino se fue al cuarto día. A pesar de todo lo que había leído no tenía ni idea de cómo sería la subida de la leche, con hojas de col frías (no se me ría nadie, eso alivia muchísimo) y masajes del Friki para ablandar los pechos mientras la niña mamaba, salimos adelante. A pesar de las limitaciones posturales por el arnés de la peque nunca hemos tenido ningún problema.

Ojalá todas las madres tuvieran un entorno como el mío, me siento muy arropada. Nadie me ha dicho ni un solo tópico demoledor de los que todas sabemos, mis vecinas más mayores babean cada vez que me ven salir por el portal con la niña comiendo en el fular como si tal cosa. He dado de mamar en muchísimos sitios (cortinglés, bancos en la calle, bares, restaurantes -uno de ellos de bastante "postín"-, en el campo) y nadie me ha dicho nunca nada, he notado bastante naturalidad.

¡¡Feliz semana mundial de la lactancia materna!!